


Hoy ¿cómo buscamos «el amor»?
Una tarde de verano, salí a tomar café con J, ella es una talentosa y hermosa profesional del marketing. Uno de los temas que acaparó nuestra atención fue el referido a una aplicación instalada en su Smartphone que le permitía conectarse de manera inmediata con un catálogo de chicos online que estaban dentro de un radio determinado, permitiéndole ver sus fotos, y si había feeling, hasta chatear con ellos y, por qué no, conocerse en persona. El resto, por supuesto, sería historia.
Esta maravillosa herramienta producida para conectar a solteros que se encuentren en un mismo lugar resulta en la actualidad el medio más popular para tener «una cita». Yo no la uso, pues estoy en pareja hace más de seis años y, aunque parezca poco tiempo, en ese momento, los métodos eran otros.
Hoy existen muchas versiones de esta aplicación, que se adaptan a diferentes dispositivos y sistemas operativos. El punto es lo poco práctico que resulta para el que desea concretar una relación sentimental perdurable. ¿Por qué? Cuando ingresas te topas con una opción (un chico/chica) y a un costado puedes ver una flecha que indica «Siguiente», y la sorpresa es que HAY MUCHOS MÁS.
El efecto que esto tiene en nuestro cerebro es el de que terminemos pensando que si te ha gustado lo que viste, de seguro hay alguien mejor, quizá más guapo, con más dinero o con mejores condiciones, y el abanico de opciones y posibilidades motiva a que no concretes nada, sino que te mantengas en una expectativa insaciable.
El resultado es lógico, una sociedad cada vez más dividida, solitaria y con menos ganas de relacionarse porque su celular le dice que allá afuera, en el mundo digital, está la persona ideal, y lo único que debes hacer es no apartar tu mirada del dispositivo y seguir tocando la flecha para ver la siguiente opción. Mientras tanto, se pierden de vista oportunidades y alternativas que en el mundo real están servidas en una bandeja que no precisamente está conectada a la banda ancha.
Y tú ¿buscas pareja a través de lo digital o aún te lanzas a la conquista face to face?